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Robó en una casaquinta, volvió días después y lo atraparon

Ya había sustraído varios elementos. Estaba vez, el dueño lo vio por las cámaras y lo detuvieron tras forcejear con la policía. Cuenta con varios antecedentes policiales.

Un delincuente de 40 años de edad fue sorprendido por la policía cuando se encontraba sustrayendo distintos elementos del interior de una casaquinta de Zelaya. Más tarde se comprobó que se trata del mismo sujeto que días atrás había robado distintos elementos de esa vivienda.

Fuentes policiales señalaron a El Diario que el hecho se produjo en la mañana de este sábado. El propietario de una casaquinta ubicada en las calles Chazarreta y Zapala, un hombre de 48 años, observó a través de las cámaras de seguridad que un desconocido había ingresado a su predio.

De inmediato se comunicó por teléfono con el Destacamento Policial de Zelaya. Un grupo de efectivos coordinados por el encargado de la dependencia, llegaron rápidamente e ingresaron al interior de la propiedad. Con el permiso del dueño, observaron la puerta de atrás violentada y abierta y al ingresar sorprendieron a un sujeto en el comedor.

Según se detalló, tenía en su poder un motor de bomba centrífuga y ya había preparado para llevarse algunos varios electrodomésticos. Al darle la voz de alto, el sujeto no la acató y se produjo un violento forcejeo con los efectivos hasta que finalmente pudo ser reducido y esposado.

Ya en la dependencia policial se comprobó que tiene 40 años y domicilio en la calle Illescas al 1100 de Zelaya. Posteriormente se esclareció otro robo sucedido en la misma finca el 31 de agosto pasado, en el que el mismo ladrón había robado un motor de la bomba de agua y diversas herramientas.

Fuentes policiales señalaron que el ahora detenido ya cuenta con antecedentes policiales por delitos de tenencia ilegal de drogas y usurpación de propiedad, todos con intervenciones de la Unidad Funcional de Instrucción N° 2 y la UFI Especializada en Investigación de Drogas ilícitas, ambas de Pilar.

En este caso, la causa fue caratulada como “robo en grado de tentativa” con intervención de la UFI N° 1 de Pilar de Raúl Casal.