“Les pido a los compañeros y compañeras más unidad que nunca”, dijo el presidente Alberto Fernández durante un acto realizado en la localidad bonaerense de Berazategui. Parado cada vez más como candidato a buscar la reelección dijo estar “más atento al murmullo de la gente y menos el griterío de la política”. Sin embargo, el griterío o la interna dentro del FdT, aunque se resista, tendrá que atender porque debe llevar adelante la mesa política, prevista para la próxima semana, pero también atender los reclamos incluso de sus aliados como algunos movimientos sociales y sectores de la CGT que todavía le son afines.
“La Patria se construye sin peleas, sin desunirnos”, dijo el Presidente acompañado de sus ministros Gabriel Katopodis (Obras Publicas) y Jaime Perczyk (Educación). Luego agregó que “cuidar la democracia no basta, tenemos que ir por algo más, necesitamos tener una nueva utopía, la utopía de la igualdad, la utopía de la justicia social, que todos tengan la oportunidad de crecer y desarrollarse en cada rincón del país”.
Buena parte de sus frases parecieron estar destinadas a esa mesa política que le reclamaron propios y extraños, que resistió todo lo posible y ahora finalmente parece que la convocará desde su cargo de titular del PJ. Fernández quiere que esa mesa se limite a hablar de la estrategia electoral y no tocar nada que se parezca a definir políticas de gobierno.
Sin embargo, esta postura no le garantiza una mesa más o menos ordenada en cuanto a la agenda de discusión porque sus propios aliados están pidiendo pista, espacio, voz y voto.
Por caso, el referente del Movimiento Evita, Emilio Pérsico dijo que todavía no recibió el llamado para participar de la mesa política. Un silencio que no es del agrado del funcionario de Desarrollo Social: “Hay que ordenar el Frente y la estrategia electoral, y de ese proceso tienen que participar los trabajadores, ya sean organizados en la CGT, como los trabajadores del nuevo conflicto social que expresan las organizaciones sociales”, dijo durante una entrevista radial.
Pérsico citó a la CGT y no fue casualidad. El consejo directivo de la central obrera tiene dos patas. Una es la que lideran los cosecretarios Héctor Daer, de Gordos e Independientes, y el barrionuevista Carlos Acuña. La otra responde al también cosecretario, el camionero Pablo Moyano. Todos abrevan en el Frente de Todos pero no todos piensan y actúan igual.
Daer y Acuña, cerca todavía de Fernández, lo presionan para tener un espacio importante en esa mesa política. De todas maneras, estos dos tienen en su corazón espacio suficiente para quien supo ser su líder político, Sergio Massa. El ministro de Economía visitará la CGT la próxima semana para hablar, en principio, sobre el escenario económico y social, las paritarias y el control de la inflación.
La reunión con Massa será previa a la mesa política y ninguno de los sindicalistas de este sector oculta que el ministro representa un potencial y querido candidato presidencial. Es más, se sienten más cómodo con el tigrense y desde hace un tiempo que recelan de Fernández porque mucho les prometió y poco concretó.
Este grupo, como Pérsico, reclaman presencia, voz y voto, pero sobre todo espacio en las listas de candidatos a legisladores. Para esto el año pasado conformaron una mesa de acción política con ese único objetivo y la anunciaron, con indisimulable desatino, el 17 de octubre.
Pablo Moyano también quiere ser parte de esa mesa política. No lo niega y si bien tiene más afinidad con el sector kirchnerista, ha dicho en más de una oportunidad que ve con malos ojos la pelea interna y que se debe buscar la unidad para evitar que vuelva a gobernar la derecha. Pero a diferencia de los otros triunviros, el camionero quiere y reclama que la mesa que tiene que convocar Fernández discuta las políticas y un programa de gobierno. Para el Presidente esto es lo que él define como “griterío”.
En Berazategui Fernández se mostró como presidente en busca de reelección. Se quejó de los medios de comunicación y se comparó con el presidente que más parece querer parecerse: “Las tapas de algunos diarios que padezco hoy las padecía (Raúl) Alfonsín también”, dijo ante miles de peronistas.
De todas formas el Presidente reiteró su llamado a la unidad: “Tenemos que estar unidos porque hay un común denominador que nos une: que los enemigos de la patria no tomen el poder”, insistió ante el auditorio colmado de intendentes, entre los que se destacaron Fernando Espinoza (La Matanza), Mariel Fernández (Moreno), Mario Secco (Ensenada) y Alberto Descalzo (Ituzaingó).
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