Lo mismo pasa con el resto de los directores que nombró en anterior Gobierno en las empresas del FGS. Para su remoción se requiere que el Estado designe remplazante.
Las demoras del presidente Milei en cubrir cargos críticos del Estado generó una situación insólita: el ex ministro del Interior, el camporista Wado de Pedro, sigue como director de Telecom en representación del gobierno.
Una anomalía que se hace extensiva a todos los directores del Estado en compañias privadas que la Anses tiene acciones.
Esto es así porque con la constitución del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la Anses, a partir de la eliminación de las AFJP, el Estado se convirtió en accionista de las compañías más importantes del país.
Se trata de mas de cuarenta empresas en las que cada gobierno debe designar entre dos y tres directores entre el titular y los suplentes. Entre las empresas mas relevantes se destacan Clarin, Telecom, Cablevisión, IRSA, Molinos, Ledesma, Banco Galicia, Banco Macro, Transportadora de Gas del Sur (TGS); Edenor; Camuzzi Gas Pampeana; Grupo Techint; Transener; Pampa Energía; Aluar y Consultatio, entre otras.
Aunque estos directores representan al Estado, son parte del cuerpo directivo de las empresas con lo cual sus sueldos y bonificaciones son financiados por estas compañías.
«Cuando se constituyó el FGS, los directores por el Estado que eran funcionarios donaban la totalidad de sus honorarios, pero con el gobierno de Mauricio Macri se eliminó esa reglamentación, y hasta hubo funcionarios que fueron directores en nueve empresas en simultáneo que cobraron nueve sueldos», detalló un ex funcionario de la Anses.
En el gobierno de Alberto Fernandez los funcionarios que además eran directores de empresas cedieron la totalidad de sus honorarios a la constitución de un Fondo destinado a la prevención sanitaria, bajo la órbita de la Anses.
El dato es que al día de hoy continúan siendo parte del directorio de las empresas ex funcionarios como Wado de Pedro en Telecom, el bonaerense Augusto Costa en Ternium del grupo Techint.
El reemplazo de estos funcionarios se define en la asamblea de directorio para el recambio de autoridades que establece cada empresa. La mayoría esta pautada para los meses marzo y abril informaron desde la Anses. Lo cierto es que los directores nombrados por el gobierno de Alberto Fernandez ya pusieron a disposición su renuncia.
Como antecedente los directores designados durante el gobierno de Mauricio Macri: Emilio Basavilbaso en el directorio de Edenor, el exintegrante del Consejo de la Magistratura Alejandro Fargosi, en el del Banco Macro, el exjefe de la Secretaría de Inteligencia Miguel Ángel Toma, en el de Ternium y el expresidente del Enacom Miguel De Godoy, en el de Edenor, continuaron en sus cargos hasta abril del 2020.
Sin embargo, ante esta situación, desde el gobierno nacional reconocen que no tienen candidatos para efectivizar los reemplazos. La idea libertaria es disolver el FGS lo más pronto posible, En una cumbre secreta con directivos de la mayoría de las empresas que tienen representantes del Estado, el ministro de Economía, Luis Caputo, les prometió rematar esas acciones a cambio que le anticipen unos 2000 millones de dólares.
Las acciones en manos del FGS equivalían a USD 13.100 millones al cambio oficial de noviembre, previo al salto devaluatorio.
En la cumbre que los empresarios a fines de enero con los funcionarios de las secretarías de Finanzas y de Energía que envío Caputo, se analizaron alternativas que le permitan al Gobierno rematar las acciones de la Anses, aún sin la ley ómnibus que habilitaba esa opción.
Los CFO de las empresas propusieron en el encuentro una normativa que obligue al Estado a vender acciones del FGS cada vez que cancela bonos del Tesoro, bajo la excusa de que de esta manera se evita la emisión monetaria.
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