El gobernador bonaerense manifestó por redes sociales su repudio a los dichos ante el Congreso de Estados Unidos del candidato de Trump a embajador en Argentina.
Aplica aranceles extorsivos a Brasil, cuestiona la soberanía del Canal de Panamá y busca condicionar procesos judiciales ajenos a su incumbencia. Incluso se permite opinar (¿estará opinando o ejerciendo presión?) sobre la absurda condena que pesa sobre Cristina. Resulta evidente que aquel fallo primero se escribió en inglés”.
“Lo más penoso y alarmante es el humillante sometimiento del gobierno de Milei a estas prácticas neocoloniales«, consideró el gobernador, que agregó que el Presidente, «además de bailar en las suntuosas fiestas de Donald Trump, ataca a los gobernadores, desfinancia a las provincias, desprecia el federalismo e incluso ha amenazado con intervenir la provincia de Buenos Aires. No es casualidad”, señaló.
Lamelas expresó, además, su voluntad de reunirse con los gobernadores para dificultar emprendimientos comerciales de las provincias argentinas con China. La respuesta de Kicillof fue tajante: “Ya le adelanto que ni se moleste en venir a La Plata: acá nadie lo va a recibir”.
El gobernador bonaerense ya había denunciado semanas atrás un intento de intervención por parte del presidente Milei sobre la provincia. Ahora, redobla su postura y vuelve a poner el foco en la defensa del federalismo y la soberanía nacional como eje de campaña. “Frente a este nivel de entrega y amenaza, las elecciones de septiembre y octubre no son unas simples elecciones legislativas. Hay que sumar fuerzas para defender la Constitución, el federalismo y la soberanía nacional”, expresó.
Kicillof cerró el comunicado con una posdata en tono directo: “Señor Lamelas: ocúpese de los múltiples problemas que tiene su país y no se meta con la soberanía argentina”.
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