El proyecto de ley Ficha Limpia, que buscaba impedir Por sobre todas las cosas, la presencia de Cristina Fernández de Kirchner en la política nacional, aunque la muchachada del Pro y de la libertad avanza hablen de personas condenadas por corrupción en segunda, fue rechazado en el Senado argentino. La votación terminó con 36 votos a favor y 35 en contra, sin alcanzar el mínimo necesario para su aprobación. Esto significa que para muchos la mayor espina clavada en el corazón de la derecha seguirá vigente y posiblemente dentro de muy poco la tengamos ocupando un cargo legislativo.
Cristina Fernández de Kirchner sigue habilitada para postularse a cargos electorales, lo que genera reacciones encontradas en el ámbito político, además de mucha bronca al punto de la explosión, por lo menos para algunos que confiaban que este proyecto era pan comido.
Algunos sectores celebraron el rechazo del proyecto, argumentando que se trataba de una maniobra para proscribir a la expresidenta, otros expresaron su descontento, señalando que la medida era clave para garantizar la transparencia en la política. Lo cierto es que la sesión estuvo marcada por fuertes debates y acusaciones cruzadas entre los distintos bloques.
Por lo pronto, la iniciativa que buscó sacar electoralmente de la cancha a Cristina Fernández de Kirchner por vía legislativa entró en una recta final y al final del túnel, no ubo luz sino confusión, bronca y escraches para quienes dieron vuelta los sueños de ver a su mayor adversario proscripto.
Ficha Limpia no solo giró en torno a Cristina Fernández de Kirchner, sino también a cómo afectaría a otros políticos con causas abiertas. La votación en el Senado estuvo marcada por tensiones entre La Libertad Avanza y el PRO, con acusaciones cruzadas sobre posibles pactos políticos. Macri y su sector, esperaban que la ley se aprobará, ya que la consideraban una herramienta para fortalecer la transparencia electoral.
Ficha Limpia, no cabe duda, buscaba todo lo contrario a la hora de garantizar transparencia electoral al impedir que condenados en segunda instancia se postularán, su aplicación y de esta reflexión no hay un margen de error, habría puesto mucho poder en manos de la justicia, que históricamente ha sido objeto de cuestionamientos por su imparcialidad.
El vínculo entre la derecha y el sistema judicial es un tema recurrente en los debates sobre lawfare y la judicialización de la política. La historia nos demuestra sin temor a equivocarse que ciertos jueces han favorecido a figuras de la derecha mientras han sido implacables con otros políticos, especialmente del peronismo. Esta realidad refuerza la idea, más que una herramienta de transparencia, Ficha Limpia podría haberse convertido en un mecanismo de exclusión política, con decisiones que responden más a la correlación de fuerzas que a la pureza institucional.
La pregunta es: ¿cómo garantizar una democracia donde las reglas sean justas para todos y el poder judicial no actúe como un actor político? Es un dilema que sigue abierto en Argentina.
El presidente Javier Milei expresó su descontento tras el rechazo de la ley Ficha Limpia en el Senado. En su cuenta de X, publicó un mensaje breve pero contundente: «Lamentable. Fin». Luego, la Oficina del presidente emitió un comunicado en el que señaló que Milei «aborrece la actitud de los senadores nacionales que han optado por priorizar la defensa de sus intereses personales y partidarios por encima de las demandas del pueblo»
Tensiones entre LLA y el PRO
Tras la votación, el vocero presidencial Manuel Adorni acusó al PRO de haber «apurado la votación» sin asegurarse los votos necesarios, lo que habría llevado al fracaso del proyecto.
Por su parte, Silvia Lospennato, impulsora de la ley, responsabilizó directamente a Javier Milei, afirmando que el gobierno no hizo lo suficiente para garantizar su aprobación.
No es novedad que la relación entre ambos espacios se ha deteriorado desde el inicio del gobierno de Milei. Mientras el PRO busca consolidarse como una oposición fuerte al kirchnerismo, LLA ha priorizado su propia agenda, evitando quedar subordinado a los intereses del macrismo.
La disputa, se da en un contexto de elecciones legislativas en la Ciudad de Buenos Aires, donde Lospennato y Adorni compiten directamente. La caída de Ficha Limpia se convirtió en un arma de campaña, con cada sector intentando capitalizar el resultado.
Escenario político tras el fracaso de Ficha Limpia
Cristina Fernández de Kirchner sigue habilitada para postularse, lo que refuerza su presencia en el tablero electoral y en caso de alcanzar un puesto legislativo en la provincia de Buenos Aires donde se prevé que estará puesta toda la carne en el asado para dar una fuerte respuesta a la madre de las batallas, Cristina no cave duda será una espina clavada en el alma de la libertad avanza
Por su parte, la relación del Pro y LLA se alejan aún más, dificultando posibles acuerdos legislativos en el futuro.
Mientras tanto en el kirchnerismo se celebra el resultado, al momento de ver a la derecha fragmentarse, sobre todo dentro de continuas acusaciones internas.
También es cierto que el Senado queda en el ojo de la tormenta marcado por la falta de consensos, lo que podría afectar futuras iniciativas de transparencia y reforma política.
Este episodio no solo evidencia la fragilidad de los acuerdos entre la derecha, sino que también abre interrogantes sobre el futuro de la relación entre Milei y el macrismo.
Tambien no hay que olvidar el rol preponderante que jugó en toda esta contienda algunas provincias, especialmente Misiones, cuyos senadores fueron clave para inclinar la balanza en contra del proyecto.
El rol de Misiones
Los cambio de postura de última hora de los senadores Carlos Arce y Sonia Rojas Decut, del Frente Renovador de la Concordia Social, quienes habían manifestado previamente su apoyo a la iniciativa, pero en la votación decidieron rechazarla, generó indignación dentro del oficialismo libertario, que los acusó de «traición». Mientras mandaba a sus troll a repartir tundas informáticas a los traidores de la patria.
Carlos Rovira, quien ya había bloqueado una iniciativa similar en Misiones en 2020, mando a su tropa a dar una vuelta de rosca y votar en contra y esta acción, fue interpretada como una estrategia para alinearse con el kirchnerismo y evitar la aprobación de la ley.
Otras provincias y su impacto
También se habló de fuertes negociaciones entre el gobierno nacional y ciertos sectores provinciales para evitar que el proyecto avanzara. La senadora cordobesa Alejandra Vigo denunció un presunto pacto entre Nación y Misiones, lo que habría influido en el voto de los senadores misioneros.
Mientras tanto la presión del kirchnerismo tuvo su efecto en el bloque de Unión por la Patria, logrando articular una defensa dentro del Senado que permitió bloquear el avance del proyecto, argumentando que la ley tenía un objetivo de proscripción política contra Cristina Fernández de Kirchner.
Consecuencias del rechazo
Cristina Fernández de Kirchner sigue habilitada para postularse a cargos nacionales y seguramente la veremos en la primera fila a la hora de la disputa en la Provincia de Buenos Aires donde se liberará la batalla final y quien sabe, sea la catapulta tan esperada par un futuro con la banda presidencial.
Y claro, lo que resta preguntarnos es si la falta de consenso en el Senado podría afectar otros proyectos de reforma política y transparencia.
Por lo pronto, algo está muy claro: el papel de las provincias en esta votaciones, demuestra cómo los equilibrios de poder en el Senado, pueden definir el destino de una ley y del país.
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